martes, marzo 25, 2008

CADA DÍA APESTAS MÁS

Hermoso mojoncito mío, el fruto preferido de mis entrañas, mimado desde que apareciste por mi ojete, todo hermosura y ternura. Pero pasó lo de siempre, tu conmovedora apariencia, tu maravilloso olor y tu intelecto inigualable se convirtió en apestosa diarrea. Mi amado mojón ahora es una de éstas plastas, que cuando las pisas no hay cojones de limpiar la suela. Mi hez preferida ahora produce náuseas. Es el destino de todo ser, y todos acabaremos igual. Las prometedoras heces se convierten inexorablemente en los peores deshechos, y bañados en fluidos viscosos engrasan la maquinaria del enorme y sofisticado WC en el que vivimos.

ANDA Y QUE NOS CHINGUEN A TODOS.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Te acabo de descubrir y veo que lo tuyo son las mierdas, hasta el color de tu blog es como el de la mierda. Que gracioso eres.

Anónimo dijo...

Eres todo un poetiso de la mierda. Ole tu arte, sí señor, Peporrín!